La Consellería de Vivienda y Planificación de Infraestructuras tiene previsto iniciar, este lunes, las acciones de limpieza y desbroce en las márgenes de la carretera PO-226, que atraviesa el municipio de Moraña.
Además de los trabajos mencionados en esta vía, en la provincia de Pontevedra se continuarán con las intervenciones iniciadas hace tres semanas en la carretera PO-801 en Crecente, así como las obras en la comarca del Morrazo, específicamente en la autovía AG-4.6 y en diversos tramos de la vía CG-4.1, que conecta a Moaña y Cangas.
En la provincia de A Coruña, seguirán los trabajos en la autovía AG-59 en Teo y en la AG-64 en los municipios de Narón y San Sadurniño.
Asimismo, en Lugo, se proseguirán las labores en la vía autonómica LU-616, que recorre O Saviñao, y en la alta prestación CG-2.3 en los municipios de Viveiro y Xove. Por último, también avanzarán las actuaciones en la carretera O-402, que atraviesa Castrelo de Miño.
El propósito de estas intervenciones es realizar la limpieza y desbroce de la vegetación en el espacio de dominación pública de las carreteras gestionadas por la Xunta, así como llevar a cabo la reparación y reposición de elementos de vallado en las carreteras autonómicas. También se busca acondicionar las zonas verdes en sendas peatonales y glorietas.
Con este programa, la Xunta intensifica sus acciones no solo para prevenir el riesgo de incendios, sino también para aumentar la seguridad vial al mejorar la visibilidad y facilitar el tránsito seguro de peatones y ciclistas.
Estas iniciativas son parte del nuevo contrato establecido con la empresa pública Seaga, destinado al control de la biomasa en los márgenes de las vías autonómicas, que cuenta con una inversión total de 4 millones de euros a lo largo de los próximos dos años, tras un incremento reciente de 1 millón de euros en el presupuesto.